El mundo puede sacudirse como ondas de agua,
las nubes pueden cubrirnos,
la música que creamos es melodía de cristales,
cada nota es un brillo estrellado,
una flor en crecimiento,
que va dejando pétalos de palabras,
cada uno es de un color distinto,
creando una cromatografía de recuerdos,
somos los escritores de plumas de águila,
los idealistas de ojos de fuego,
los volcanes explosivos de sentimientos,
somos y seremos familia de almas soñadoras.
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